Agustín Caillava

    Algunas reflexiones iniciales sobre mi desempeño a lo largo del trabajo práctico. Arranqué bastante desorientado, sin poder organizar la investigación y la información que iba acumulando. Reconozco que esto me jugó en contra al momento de empezar con las primeras bajadas formales. El quiebre se dio a partir de la charla de Alejandro Miranda, en donde enfoqué mi propuesta por un comentario que tuvo:  “ ... le pedimos a los pacientes que hagan fuerza hasta que les duela ...”.     Teniendo en claro para donde quería direccionar el diseño, empecé con un análisis más detallado de las posturas y que formas tenía que adaptarme a los elementos circundantes.    El proceso de diseño atravesó 3 etapas: escasa comunicación (no se comprendía el modo de uso), complejidad innecesaria (demasiados pasos para utilizarlo) y síntesis (reducción de piezas innecesarias, diseño intuitivo).     Dentro de los aspectos pendientes por mejorar creo que faltó más desarrollo de producto y de d

Sobre la charla que tuvimos el lunes 6 en la sala de teleconferencias, rescato lo siguiente de los apuntes que llegué a tomar: - Método en contexto. - Recorrido del diseño. - Experiencia, fases, puntos de contacto, riesgos y posibilidades. - Momentos críticos Me resultó interesante el concepto de ficha de persona , herramienta que permite hacer una caracterización y descripción profunda de un tipo de usuario. Y nos permite pensar y desarrollar más en profundidad al usuario con respecto a la forma en la que venimos trabajando, en donde proyectamos desde un usuario de carácter más amplio. Me interesó la información que nos aportó de podcasts, sitios para investigar y perspectivas de diseñadores que trabajan en servicios (Alan Cooper). Como crítica personal, creo que va a ser un desafío el diseño de servicios. Durante toda la carrera estuvo puesto el foco en productos para determinados usuarios, por lo que intuyo que se rompería el esquema y la metodología que fui armando para